Ramona, la banda originaria de Tijuana que ha conquistado escenarios en México, Sudamérica y Estados Unidos, presenta Portales, un disco íntimo que condensa aprendizajes y un espíritu creativo.
En entrevista para Día de Perros, Chuy y Omar, integrantes del grupo, comparten las vivencias que inspiraron su más reciente producción, las anécdotas más insólitas de sus giras y cómo su sonido indie mexicano ha evolucionado desde Los Himnos del Amor.
El origen espiritual de Portales
Concebido en plena pandemia, Portales nació de la necesidad de crear sin esperar las “condiciones perfectas”. “Decidimos hacerlo con lo que teníamos a la mano, montar nuestro propio estudio y experimentar”, cuenta Omar. El resultado es un disco que viaja por paisajes sonoros íntimos y etéreos, con guiños a cintas analógicas, sintetizadores Omnicord y una producción que privilegia la simpleza y la narrativa.
Chuy explica que el nombre Portales evoca “lugares que conectan con otros mundos, no solo físicos, sino también emocionales y espirituales”.
Giras, anécdotas y resiliencia en carretera
Ramona ha tocado en escenarios tan diversos como pequeños bares en Argentina o festivales masivos en México. Sin embargo, no todo ha sido glamour. Una de sus anécdotas más recordadas fue quedar varados en un casino en Estados Unidos, donde terminaron vetados. “Tuvimos que conseguir que un fan nos prestara una camioneta para seguir la gira”, recuerda Chuy entre risas.
Pese a las adversidades, las giras han sido el combustible creativo de la banda. “Cada ciudad te deja algo: desde un platillo típico en Oaxaca hasta una charla con un desconocido en Puebla. Todo eso se convierte en música”, dice Omar.
Lo que viene para Ramona
La banda se prepara para presentaciones en Oaxaca, Puebla y Ciudad de México, donde promete shows inmersivos con un setlist que integra los matices de Portales junto a sus clásicos.
Con un sonido que transita entre lo nostálgico y lo contemporáneo, Ramona reafirma su lugar como uno de los proyectos más sólidos del indie mexicano. Portales no solo es un disco: es una invitación a cruzar al otro lado de la música.
